Blogia
La geniera...y otros cuentos

Yo

Y de repente... es junio

Han pasado ya ciento cuarenta y tantos días de este 2009.

A mi es que todo me pilla desprevenida últimamente...

Continuando con los desfases temporales hoy me he levantado pensando que era viernes

(En realidad debería decir: me he vuelto a levantar, porque casi nunca sé en que día me vivo, excepto los domingos, que no se me despista ni uno)

E incluso he dicho varias veces "mañana tal" y "mañana pascual" planeando el fin de semana... tres días antes.

Debe ser este calor sahariano que me trastorna... más.

Me tira la sisa

Estoy autoconvenciéndome de que la semana sólo (sólo?)! tiene cinco días y que después ya viene el fin de semana, que es una unidad espacio-temporal en sí misma (y a mi que no me vengan con que sábado y domingo duran lo mismo que lunes y martes porque no), pero ya apenas oigo nada más que rrrrrrrrrrrrrr rrrrrrrrrrrrrrrr rrrrrrrrrrrrr a mi alrededor. No descarto la posibilidad de tener una malformación en el oido interno... o puede que se me haya vuelto a gastar la paciencia y tenga que ir a la tienda a comprar más.

Debería haber semanas con número de días aleatorio, así no todos los marrones caerían en lunes

Debería haber semanas con número de días aleatorio, así no todos los marrones caerían en lunes

Porque hay lunes fantásticos, maravillosos, increibles...

Y no, yo no nací en lunes (in case you’re wondering), yo nací un viernes... qué cosas...

Escapadas de ida y vuelta

Escapadas de ida y vuelta

Y todo aquel que confunda el verbo hacer con el verbo echar merece, desde mi punto de vista, arder en el infierno

Y todo aquel que confunda el verbo hacer con el verbo echar merece, desde mi punto de vista, arder en el infierno

Así que ya sabeis donde voy a pasar la eternidad... XD

Crónica del primer sábado "de salir" voluntariamente abstemio

Crónica del primer sábado "de salir" voluntariamente abstemio

jdsncvhav nvauviner navjk ankierva y muerte y destrucción.

- Pedí hasta tres Nesteases, en un bar en el que hasta la fecha sólo había pedido cerveza, mientras a mi alrededor volaban las jarras de la susodicha como si fueran pipas (que una vez que empiezas ya no puedes parar).

- Pedí una cocacola en un restaurante italiano en lugar del Lambrusco que se pimplaron mis acompañantes.

- No pedí nada en el único bar de Zaragoza por el que pongo la mano en el fuego de que no dan garrafón.

- Me aburrí tanto que me hubiera cambiado por cualquiera de las chonis que celebraban una despedida de soltera a nuestra vera en el italiano disfrazadas de bailarinas orientales, con su falda de monedas tintineante y todo.

- Me aburrí tanto que no sólo hice mentalmente la lista de la compra, sino que llegado un punto de la noche creo que intenté recordar las valencias del Manganeso y el punto de fusión del Aluminio.

- Me aburrí tanto que cuando me pillé un taxi para irme a casa y el taxista, al decirle la dirección, la confundió con otra, no le corregí hasta que prácticamente llegamos a la otra porque eso era, a todas luces, lo más "emocionante" que me iba a pasar aquella noche.

¿Cuántas Cocacolas te puedes tomar en una noche sin producirte una úlcera?

¿Cuántas Cocacolas te puedes tomar en una noche sin producirte una úlcera?

Estoy a punto de comprobarlo.

Esta noche salgo y voy a estrenar mi, recién adquirida, sobriedad total con un par (o tres) de alcohólicas de probada solvencia. Es más que probable que a la media hora esté intentando cortarme las venas con las llaves.

PD: Sólo temo poner en peligro mi integridad física pidiendo un Nestea en el Pottoka XD

Si no fumas, no bebes y no follas...

Si no fumas, no bebes y no follas...

He decidido dejar dejado de beber. No como cuando dejé de fumar, no es "a ver cuanto duro", es "a ver que pasa si lo dejo... pongamos un año".

Ahora es cuando me toca explicar que no es que beba mucho, que no soy tan alcohólica como se podría esperar de alguien que decide voluntariamente dejarlo. No. Forma parte de las nuevas normas, de los nuevos límites. Me he dado cuenta de que no puedo dejarlo todo a la improvisación, a lo que me apetezca, o no, hacer en un determinado momento, eso no funciona para mi, necesito saber que lo poco o lo mucho que está bajo mi control está exactamente eso, bajo control.

También voy a dejar el chocolate, pero ese es otro tema...

Es duro/triste/patético admitir que necesitas normas

Es duro/triste/patético admitir que necesitas normas

Y no, no he dicho reglas, he dicho normas. Con sus principios, sus finales y toda su metodología de pasos y transiciones. Claras, directas y con ese grado justo de mutabilidad que permite volver a revisarlas y a redactarlas sólo si la nueva norma mejora a la antigua (o si algún lobby suelta la pasta, pero ese es otro tema).

Así me encuentro, reeducando en los límites a la adolescente en la que me estoy estaba convirtiendo... no es acojonante?!

Y dejaré que el efecto mariposa haga el resto

Y dejaré que el efecto mariposa haga el resto

Hace tiempo (y como el tiempo es relativo y existen horas eternas y años que se pasan sin sentir, no concretaré más)  me di cuenta de que no iba a haber un gran BUM! en mi vida, y con "un gran BUM!" me refiero a cualquier cambio radical, cualquier giro inesperado de guión que hiciera que de repente todo fuera distinto, sin transiciones largas, sin tiempo para decidir. Porque ese es el problema, si puedo elegir, jamás elegiré el BUM!... aunque lo espere. Por eso me niego a ir a que me lean las cartas/manos/posos del café, por ejemplo, (tengo una legión de amig@s fanátic@s de los brujos de todo pelo... pero ese es otro tema) no porque crea o deje de creer (no, no creo, pero ese tampoco es el tema), ni porque me dé miedo lo que me puedan decir, sino porque como me digan que me va a pasar algo que resulte ser de mi agrado, estoy jodida, porque simplemente no dejaré que pase. Ya me las maravillaré yo, ya...

Así que ante la ausencia del grande voy a dedicarme a los BUM! pequeñitos, los que puedo hacer yo, los que no generan grandes conflictos y, por eso mismo, no requieren de grandes explicaciones.

Veremos.

Voy a esperar a que haya doce para ser la trece

Voy a esperar a que haya doce para ser la trece

No se para que vuelvo pero vuelvo.

Mi madre, al regresar de hacer la compra, me ha dicho: toma...

... y me ha dado un desodorante Dove.

Yo, que la memoria la tengo sin usar...

Yo, que la memoria la tengo sin usar...

Me he comprado un desodorante nuevo. Bueno, no es nuevo nuevo, es de la misma marca que el anterior pero otro "modelo". Hasta aqui todo normal, pero es que yo este olor lo conozco y no del bus ni de la cola del super, precisamente, pero no sé de cuando y, más concretamente, no sé de QUIEN.

Y como yo no soy nada obsesiva (inserte emoticono ROFLMFAO) pues ya tengo entretenimiento para la neurona por tiempo indefinido (lo que me duré el desodorante) y no porque haya muchas candidatas sino porque admitámoslo, voy a ser incapaz de saberlo con certeza.

Pero la mayor parte del tiempo te debates entre la solución mala y la peor

Pero la mayor parte del tiempo te debates entre la solución mala y la peor

Me he hecho un planning, precioso, con colorines, intentando sobrevivir a pasar los próximos diez días.

No es que dentro de diez días algo vaya a cambiar, es que es Semana Santa y es fiesta.

Bye bye peace, bye bye loneliness, I think I'm gonna cry...

Bye bye peace, bye bye loneliness, I think I'm gonna cry...

En mi casa nunca ha habido demasiada gente. No es (en absoluto) una queja, al contrario. Adoro la tranquilidad por totalmente necesaria.

Llevo apenas una semana sola en casa y pagaría por... un par de años más?

 

Geniera modo Quépocoduralaalegríaencasadelpobre activado

En el Instituto de mi pueblo hay un concurso de cortos... en mis tiempos no era necesario, todos sabíamos quienes eran

En el Instituto de mi pueblo hay un concurso de cortos... en mis tiempos no era necesario, todos sabíamos quienes eran

Me quedan dos días de soledad.

El increible caso de la pérdida del móvil maligno en mitad de la noche, en un bosque y sin cobertura y su posterior aparición

El increible caso de la pérdida del móvil maligno en mitad de la noche, en un bosque y sin cobertura y su posterior aparición

Tal cual.

Cosas veredes, querido Sancho... 

¿Hay días en que desearías desaparecer? Yo, egoista de mi, desaparecería 364 al año (365 los bisiestos)

¿Hay días en que desearías desaparecer? Yo, egoista de mi, desaparecería 364 al año (365 los bisiestos)

Soy una asocial nata. Rozando, algo más que levemente, la patología.

Y mentiría si dijera que mejoro con el tiempo... cuando se me conoce... si se me da una oportunidad...

La verdad es que empeoro cíclicamente, con los otoños... o era con las primaveras?

Y mentiría, también, si dijese que quiero ponerle solución. "Aprender habilidades sociales" haría que me sintiera como el perro amaestrado que responde adecuadamente a las órdenes de su amo (un "dáme la patita", seguido de unas palmaditas en el lomo).

Demasiado trabajo. Acabaría mordiendo.

Últimamente todas las noches (de juerga) en Zaragoza se me parecen

Últimamente todas las noches (de juerga) en Zaragoza se me parecen

Todo empieza con dos horas interminables, mirando un punto de la pared de enfrente y escuchando oyendo conversaciones, que no me interesan, aderezadas con cerveza. Después se cena en algún lugar de comida (medio)exótica (estoy deseando volver a poder pedir un bistec con patatas). A estas alturas, con un poco de suerte, el alcohol, y haberme quedado con hambre en la cena, empiezan a hacer efecto y ya todo me chupa un pie.

Y se acaba la noche, demasiado tarde, consumiendo algún cubata de garrafón infernal. Con otro poco de suerte me queda dinero para un taxi y mi cama parece (talmente) el cielo.

PD: Volvimos a encontrarnos con el sillón orejero (no, nada de casualidades y de lo pequeña que es Zaragoza, es que una de mis amigas sale no oficialmente con el amigo y claro, acabamos tos juntitos) y.. hasta me pareció simpático el chaval (claro que con lo que yo tenía alrededor hasta hablar sola era superdivertido).